domingo, 17 de octubre de 2010

cronos

  Para empezar, nunca en mi vida he realizado una crítica a una película a pesar de que he leído miles de ellas. Voy a intentar ser lo menos pesado posible y lo más objetivo (esto es imposible) que mi intelecto me permita.


Cronos, o su título original La Invención de Cronos (1993) se trata de la ópera prima del visionario director mexicano Guillermo del Toro. Esta película es una visión diferente del mito vampiresco de Drácula.

La película está centrada en un artefacto en forma de escarabajo que encapsula un mecanismo creado por un alquimista en 1535. Este artefacto, que proporciona la vida eterna al que lo manipule, logra llegar a nuestra era y es descubierto por un anticuario llamado Gris (Federico Luppi). Éste revisa en un primer momento el objeto y sin esperárselo las patas de susodicho objeto le agarran fuertemente el brazo mientras le inyectan una extraña solución (que el objeto produce constantemente).

Más tarde nuestro protagonista se dará cuenta de que el escarabajo le extrae la sangre, pero a cambio le proporcionará una notable (por no decir sobresaliente) mejora tanto de su salud como de su vigor. En otras palabras, rejuvenece. Pero, en cambio, va a desarrollar un fervor apetito por la sangre que en un principio le repugnará y finalmente caerá en la tentación.

El problema se agrava cuando Dieter de la Guardia (Claudio Brook), un empresario rico y en estado agonizante que conocía de la existencia de este artefacto y llevaba gran parte de su vida buscándolo, descubre que el anticuario posee el escarabajo. Para tratar de recuperarlo manda a su sobrino Angel (Ron Perlman) en su busca. 

Gris se negará en entregar el objeto ya que presiente que lo emplearán con fines malévolos. Termina poniendo en peligro a su nieta, quien luchará junto a él para evitar que el artefacto caiga en malas manos.

Hasta aquí un poco la sinopsis de la obra que catapultó al genio mexicano. No en vano tenemos que decir que esta película no hubiese sido lo que es sin la sobresaliente actuación del protagonista, Federico Luppi, actor argentino que se convirtió en un frecuente colaborador de nuestro director al igual que Perlman (nuestro querido Hellboy), aunque en mi opinión su papel como villano no está a la altura de el resto de personajes ya que es hace un papel de malo demasiado "convencional".

Esta película es un soplo de aire fresco a la industria del cine, es una de esas joyas que de vez en cuando nos proporciona este arte (para mí el cine tiene muy poco de arte, es pura industria) y se encuentra muy por encima de lo que estamos acostumbrados. Tiene cierto carácter de película independiente.

Esta cinta fue muy laureada consiguiendo 8 premios de la Academioa de Cine de México, premios en el Festival de Cannes...

En fin, no es una crítica completa  pero creo que puede valer como mi primera incursión en este mundo. Lo que no voy a hacer es ponerle nota, creo que lo mejor es que la veáis y se la pongáis vosotros mismos.

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